Estancias
A la hora de elegir dónde dormimos, hay dos planteamientos generales, independientemente del presupuesto del viaje que manejemos:
- tienda de campaña, camping, acampada libre, etc.
- habitación, casa particular, hotel, B&B, albergue, etc.
En nuestro caso, la tienda no la contemplamos, simplemente porque después de un día en moto más la visita que es posible realizar en la ciudad de destino del día, a la hora de dormir, preferimos una cama, aunque sea mala, al mejor saco. No es más que una opinión personal; hay muchísima gente que utiliza la tienda y eso, además de lo bien que le sienta al presupuesto del viaje, proporciona una gran libertad de movimientos.
Nosotros preferimos la habitación, planificada y con reserva anticipada, al menos mientras no despatarre el presupuesto del viaje. Hay quien viaja sin tener nada reservado y lo busca cuando llega al destino y quien lo lleva reservado, como es nuestro caso. Lo hacemos así porque cuando llegamos al final de la etapa del día, prefiero dedicar el tiempo a realizar alguna visita, un paseo, una buena cena… que a andar buscando hotel.
Puede que llegues a un pueblo pequeño con pocos hoteles o puede que no haya habitaciones libres, con lo que tienes que dedicar aún más tiempo e incluso puede que tengas que seguir unos kms. más buscando un hotel con habitaciones disponibles. Eso sin contar con que es muy probable que el gasto se dispare (poca oferta disponible significa altos precios).
En cambio, si lo reservas antes de salir, tienes muchas opciones, precios mejores, tiempo para buscar y normalmente no hay gastos de cancelación, con lo que si estás pendiente puedes ir buscando las diferentes ofertas que puedan ir saliendo.
Buscar habitaciones, valorarlas y reservar lo hace Elisa; tiene buen ojo para elegir hotel y además, al hacerlo con bastante antelación, está al tanto de las ofertas que puedan ir saliendo y va cambiando. El caso es que encuentra hoteles muy majos, a muy buen precio y la mayoría de las veces, son habitaciones muy chulas.
Solo he ido sin reserva el primer viaje en solitario y otra vez, ya con Elisa, a Croacia con Manolo y Merche. Pero el caso de Croacia es muy especial porque hay un porcentaje muy alto de casa particulares que alquilan una habitación, un sótano, un añadido que han hecho en el jardín…. Incluso una cama en la cocina…. Y además están perfectamente anunciadas, por todos lados ves carteles de SOBE (curioso parecido con nuestro verbo castizo «sobar» para referirse a dormir).
Quizá el aspecto económico sea el más relevante y efectivamente, si no estás espabilado, este concepto se puede llevar un pellizco importante del presupuesto del viaje. El precio de una noche en hoteles de calidad media o similares en países como España, Francia o Italia, pueden oscilar entre 35 y 100 €. Es decir, para un viaje de 10 días estamos hablando de un rango de entre 350 y 1000 €.
En definitiva, que si dedicas tiempo a buscar buenas ofertas puedes ahorrar un pico importante. Luego cuando hablemos del presupuesto podremos concretar un poco más. Lo que es importante es que internet ofrece cada vez más herramientas para gestionar reservas de hoteles y habitaciones, con buenos precios, ofertas y ventajas, para mí la principal es la posibilidad de cancelar sin gastos, lo cual da mucho juego.
Si viajas sin reservas no estás atado a unos puntos de llegada diario, tienes la libertad de quedarte a dormir en cualquier sitio y no hay riesgo de perder dinero en caso de no poder llegar a destino. Sin embargo, en mi opinión, tienen un gran inconveniente y es que cuando llegas al destino del día, estés más o menos cansado, tengas ganas o no, debes ponerte a buscar un sitio para dormir y sin demasiado margen para buscar diferentes opciones; o bien, te quedas en el primer sitio que encuentres y asumes el más que seguro sobrecoste que eso significa.
Presupuesto del viaje
Y llegamos al meollo de la cuestión ¿por cuánto me va a salir la fiesta?
Lo cierto es que aunque no es complicado hacer una previsión bastante ajustada, mantenerme en la previsión me resulta complicado sobre todo por las comidas y cenas. En principio voy con la idea de “contención alimentaria” pero la idea de probar cosas nuevas, conocer otras culturas culinarias o ahondar en la propia, me puede; no soy capaz de contenerme y claro, eso desmonta cualquier previsión en dos días.
En cualquier caso, para tener una idea suficientemente ajustada del coste hay que calcular algunos conceptos. El valor obtenido en cada concepto lo ajusto con un 20% de incremento, por si hay algún imprevisto.
- gasolina, todos sabemos lo que gasta nuestra moto y si no lo sabes ya puedes empezar a controlarlo. Mi moto gasta algo menos de 6 litros, como vamos a ir dos y cargados, redondeo a los 6 l/100 kms. Por tanto, si la ruta planificada son 2000 kms: 20006 / 100120 litros1,6€1921,2 (ajuste)230€
- estancias, Elisa encuentra habitualmente buenas habitaciones y hoteles en un rango entre 30 y 60 €, para este cálculo utilizo una media de 45€, si pasamos por algún sitio “barato”, o de 50 en caso contrario; por tanto: 1550€ 750€1,2 (ajuste)900€
- comidas, calculo para dos personas unos 50€ diarios para desayunos, comidas y cenas. Aquí es dónde siempre me quedo corto, porque comer en un restaurante medio normal ya son 50€ los dos. Así que si un día te metes en algún sitio un poco más “fino” el presupuesto del viaje se resiente. Siempre hago la previsión contando que este año sí que vamos a comprar en supermercados, sí vamos a controlar los desayunos y cenas y sí buscaremos para comer sitios con pinta de “caseros” y baratos y blablabla. En definitiva, con autoengaño incluido: 1550€750€1,2 (ajuste)900€
- Reposición de sales minerales y otras vitaminas durante y después de la ruta, antes, durante y después de la caminata de visita al lugar, etc. 40€ día. Esto supone un par de refrescos en ruta, unas cervezas después de la ruta y, quizá, una copa por la noche cada uno. Vamos, que no es una exageración de bebida, no estoy haciendo apología del desenfreno alcohólico. Por tanto: 1540€600€1,2 (ajuste)720€
- varios, recuerdos para la familia y amigos, cositas que vas comprando a modo de recuerdos del viaje y algún que otro gasto pequeño que pueda ir surgiendo como entradas a algún lugar de visita, etc. Sin pensarlo demasiado: 300€
Ahora te pones a sumar: 230 + 900 + 900 + 720 + 300 3050€ 15 días para dos personas. Ahora es cuando te prometes a ti mismo que vas a:
- ir despacio para gastar menos gasolina
- utilizar albergues, aunque sean con baño compartido o desempolvar la tienda de campaña
- comer en parques y jardines embutidos y fiambres del supermercado local
- beber agua (jajajaja)
Lo bueno es que si de verdad te controlas un poquillo, el presupuesto va un poco “sobrado”; recuerda que hemos metido un 20% de ajuste para prever algún posible exceso. Eso sí, si vas a Austria, Suiza, Noruega, Dinamarca, etc. prepárate para rehacer todos estos cálculos y rebuscar en los bolsillos.
Finalmente, señalar que una vez determinado el itinerario completo, la parte económica referida a las estancias deja de ser una previsión y se convierte en un valor cierto puesto que tienes las reservas de cada día y conoces su precio. Toca ajustar el presupuesto con este valor y, probablemente, celebrar que has ahorrado unos euros respecto a la previsión inicial. Además, al hacerlo con tiempo, es posible que puedas acogerte a alguna oferta que vaya saliendo, con lo que reduces el concepto de habitaciones a medida que va pasando el tiempo.
Si has llegado hasta aquí has superado el peor paso de la planificación del viaje. Calcular el coste y no huir despavorido prácticamente significa que ya está marcha y no hay vuelta atrás. Así que, enhorabuena y adelante, que ya queda muy poco.